viernes, 25 de febrero de 2011

El Reino de Dios está cerca

De nuestra amiga Maria Luisa:

EL REINO DE DIOS ESTÁ CERCA

Para los cristianos de hoy, el texto evangélico que nos narra Mateo 4,12-23 ; tiene un conocido sabor mesiánico. Ya no son solamente los israelitas desterrados los que están en tinieblas, sino todos los seres humanos alejados de Dios, sumidos en violencias, codicias,vanidades tan oscuras como la muerte.

Anhelamos ser liberados, ver despuntar el sol de la justicia, de la paz , de la reconciliación y unidad de todas las naciones. El argumento para exigir la unidad y deponer las banderías políticas y religiosas, es único y contundente: CRISTO no está dividido, él murió por todos y solamente en su Nombre hemos sido bautizados y en su Nombre permaneceremos unidos.

El evangelio del domingo, es una especie de sumario o resumen del Ministerio de Jesús. En el distrito de Galilea, habitado por judíos y paganos, va recorriendo las sinagogas, los campos y las aldeas, proclamando la llegada inminente del Reino de Dios. Comienza llamando en pos de sí a un grupo de discípulos, comenzando por Pedro y Andrés a quién les dice:”Vénganse conmigo y los haré pescadores de hombres”.

Para Jesús no hay exclusivismo que valga, no va primero a predicar a Jerusalén, a la capital de los poderosos, sino que se dirige a la Galilea de los paganos-

No predica solamente en las sinagogas sino también a campo abierto, a todo el que quiera escucharle. Su mensaje es la proclamación de la visita de Dios misericordioso, paternal, amigable, que viene a sanar y a salvar, a alimentar y a perdonar, a consolar y a liberar.

Él es la Luz que anunciaba Isaías, el es el portador de alegría y gozo para los que sufrían y sufren cautividad,

es la victoria sobre el pecado y la muerte.

Para que el Evangelio remonte los tiempos y los lugares, lo encomienda a una sucesión de testigos, apóstoles suyos, enviados que lo llevan hasta los confines del mundo.

Es la misión que le dejó a su Iglesia, la que nos convoca permanentemente a unirnos en torno a Jesucristo, el único Mesías, el único Salvador y el único mediador entre Dios Padre y los hombres.

Nos toca hoy, asumir el compromiso que hicimos el día en que,conscientemente, nos convertimos a él, compromiso de continuar su obra,iluminando al mundo con

LA LUZ DEL EVANGELIO porque ser cristiano es eso y no otra cosa:ser seguidores de Jesús, luchadores por su causa ¡EL REINO!

No hay comentarios:

Publicar un comentario